Mecenazgo y Economía Naranja: Observando el Pulso Cultural de la República Dominicana
“La cultura es el alma de un país, y en momentos de cambio es fundamental que todos podamos unir fuerzas para fortalecerla. En República Dominicana, la Ley de Mecenazgo busca impulsar proyectos culturales, apoyando tanto a artistas como a organizaciones sin ánimo de lucro. Sin embargo, el camino a veces presenta retos. Desde nuestra fundación, vemos una gran oportunidad para que la sociedad y el sector privado se involucren y apoyen el desarrollo de la cultura nacional. ¿Qué opinas de esta iniciativa? ¡Conversamos sobre el poder del mecenazgo en la cultura!”
Fundación Arte Castilleja
Desde nuestra perspectiva como organización básicamente cultural, observamos y analizamos el desarrollo cultural en la República Dominicana y, percibimos la profunda relevancia de los esfuerzos hacia la promoción del mecenazgo y el crecimiento de la economía naranja en el país. Sin pretender una injerencia, reconocemos los avances significativos que han logrado instituciones clave, así como el impacto de iniciativas como la Ley de Mecenazgo. Esta legislación no solo establece incentivos para el desarrollo de empresas culturales y creativas, sino que también contribuye a consolidar la cultura como un sector económico robusto y sostenible.
La colaboración interinstitucional en República Dominicana, con actores como el Banco Popular Dominicano y el Instituto Tecnológico de Santo Domingo (INTEC), es un ejemplo destacable de cómo el sector público y privado están trabajando para cimentar un ambiente propicio para las industrias creativas. A través de este acuerdo, se han impulsado proyectos de formación y creación de infraestructura digital que responden a las necesidades específicas de los negocios creativos, desde financiamiento hasta la formalización y visibilidad en el mercado.
Esta iniciativa, alineada con la Estrategia Nacional de Desarrollo y apoyada por el Ministerio de Cultura y otras entidades nacionales, refleja un sólido compromiso con la cultura. Los resultados obtenidos en estudios y encuestas, como los datos de la Encuesta Nacional de Consumo Cultural, respaldan la relevancia de este sector, no sólo en términos de desarrollo económico, sino como pilar de la identidad nacional y del turismo cultural.
A través de este y otros análisis, invitamos a una conversación sobre la importancia del mecenazgo en el fortalecimiento de la cultura y la economía creativa, un esfuerzo compartido que, sin duda, enriquecerá el patrimonio cultural y el crecimiento económico de la República Dominicana.
Fdo. Jose Brihuega
A continuación reproducimos dos importantes artículos publicado por el Banco Popular en su portal institucional y, un análisis de las novedades que introduce la reforma de la ley del mecenazgo de España
Importancia de la Ley de Mecenazgo en el desarrollo de la economía naranja
Para impulsar el crecimiento de la economía naranja, se necesita de la creación de políticas públicas que creen las condiciones para que las industrias creativas y culturales se desarrollen exponencialmente.
En el 2019 se promulgó en el país la Ley 340-19 de Mecenazgo, la cual tiene como finalidad crear los incentivos y herramientas necesarias para promover la creación de empresas creativas y culturales, midiendo el peso y el aporte de la cultura en la economía de la nación.
Esta ley favorece a los artistas, gestores culturales y entidades culturales públicas o privadas que diseñan propuestas que promueven la creatividad y la cultura del país, las cuales deben ser presentadas al Consejo Nacional de Mecenazgo.
La Ley 340-19 también creó el Consejo Nacional de Mecenazgo, presidido por el ministro o ministra de Cultura regente; así como la Dirección General de Mecenazgo, adscrita al ente cultural estatal.
Dentro de los alcances establecidos en la Ley de Mecenazgo se pueden destacar los siguientes:
Estimular y proteger la formación de profesionales en los ámbitos de la creación artística, gestión, gerencia y administración de proyectos; orientados al fomento, desarrollo, innovación y modernización del sector cultural.
Fomentar el coleccionismo público y privado, mediante el estímulo a la compra directa de obras u objetos de arte a los artistas o las instituciones de intermediación comercial dentro del área de esa especialidad (galerías de arte y afines), legal y lícitamente constituidas a tales fines.
Incentivar las donaciones económicas para programas sin fines de lucro, generados por instituciones públicas o privadas.
Apoyar el apadrinamiento o patrocinio de proyectos, propuestas y programas de investigación académica, científica y cultural.
Suscitar la divulgación artística y cultural, a través de la edición de publicaciones especializadas; exposiciones de arte, concursos de arte y literatura, producciones audiovisuales o radiofónicas, ferias artesanales, foros, conferencias y congresos nacionales e internacionales relacionados con la actividad artística y cultural.
Promover las artes y artesanía nacional, como ejes sobre los cuales se sustenta una buena parte de la memoria visual de la cultura y de la identidad nacional; así como la preservación, restauración, puesta en valor de bienes inmuebles y muebles pertenecientes al patrimonio cultural de la nación.
Estimular el fomento y la formación de capacidades técnicas para las academias y centros de formación en el sector artístico y cultural.
Desarrollar actividades que contribuyan a fortalecer y articular la productividad en la economía y la industria de la cultura.
Además, con la Ley de Mecenazgo se creó el Fondo Solidario de Apoyo a la Cultura, con recursos financieros provenientes de aportes y donaciones de benefactores del sector público y privado que contribuyen al fortalecimiento y desarrollo de las capacidades de las mipymes culturales.
Con estos aportes, se promueve la creación de programas de formación, capacitación técnica y profesional, para el sector artístico y cultural.
Economía naranja: crecimiento de las industrias culturales y creativas en el país
Desde el año 2012 se inició un nuevo modelo de crecimiento con la Estrategia Nacional de Desarrollo (END 2030), la cual contempla el fortalecimiento de las industrias culturales y creativas (ICC) en el territorio nacional.
Entre sus objetivos principales se encuentra el desarrollo de la oferta cultural, con la finalidad de producir y comercializar productos o servicios más atractivos para la actividad turística, mientras promueve el patrimonio cultural del país y fortalece la identidad de los dominicanos.
Dentro de la economía naranja se destaca la gestión de la industria cultural: artes escénicas, museos, galerías de arte y editoras, al igual que la gestión de la industria creativa, como moda, arquitectura, diseño gráfico, negocios audiovisuales y de tecnología, entre otras categorías.
En el boletín 22 del Ministerio de Industria, Comercio y Mipymes, sobre las industrias culturales y creativas, se presentan los resultados de la Encuesta Nacional de Consumo Cultural de República Dominicana 2014 (ENCC-RD 2014).
De acuerdo con el documento, cerca de 1.8 millones de dominicanos consumen los productos de las industrias culturales y creativas del país, siendo el cine y los eventos artísticos – musicales los más frecuentados por la población y donde el gasto es mayor.
El Banco Central y el Ministerio de Cultura crearon de la Cuenta Satélite de Cultura (CSC), un sistema de información económica relacionada con las actividades y productos de la industria cultural y creativa.
Dentro de esta iniciativa y con el objetivo de conocer y medir los sectores que intervienen en las industrias culturales y creativas, presentaron el primer Directorio Nacional de Empresas Culturales, donde se registra que cerca de 2,042 empresas pertenecen al sector cultural, dividido de la siguiente manera:
– 31.8% visuales.
– 24.2% de educación cultural.
– 18.6% audiovisuales y radio.
– 18.2% dedicadas a la publicación de libros.
– 4.3% de artes escénicas y espectáculos.
– 2.9% de la música.
Para el 2016, según el reporte de seguimiento de la Cuenta Satélite de Cultura, las contribuciones de la economía naranja aportaron el 1.5% del PIB del país, demostrando su rápido crecimiento.
La promoción de las industrias culturales y creativas en el plan de desarrollo nacional compromete a las instituciones dominicanas públicas y privadas a aunar esfuerzos para impulsar el desarrollo de esta industria.
Cumpliendo con lo anterior, el Ministerio de Industria, Comercio y Mipymes (MICM), el Banco Popular Dominicano y el Instituto Tecnológico de Santo Domingo (INTEC) firmaron un acuerdo interinstitucional para impulsar el desarrollo de la economía naranja en las industrias culturales y creativas a nivel nacional.
La finalidad de este acuerdo es fortalecer las industrias culturales y creativas que aportan un gran valor a la economía nacional, ejecutando iniciativas que eleven su potencial, ofreciéndoles programas para mejorar sus capacidades e instrumentos financieros diseñados especialmente para los negocios de ese sector.
Dentro de las iniciativas se contempla la creación de un directorio de empresas creativas, página web y cursos de formación en línea, así como impulsar los emprendimientos y formalización de las empresas de los sectores creativos y culturales.
ALGUNOS DATOS SOBRE EL SECTOR DE LAS FUNDACIONES Y EL MECENAZGO EN ESPAÑA Y SU IMPORTANCIA EN LA ECONOMÍA
Sólo el gasto de las Entidades no Lucrativas (ENL) en actividades de interés general alcanza casi los 17.000 millones de euros y, en el caso de las fundaciones, en los últimos 12 años se ha multiplicado por 2,45 el número de beneficiarios finales y directos de sus actividades de interés general. Se estima que el total del sector fundacional en España genera más de 27.000 millones de euros de valor añadido en 2020 (2,4% PIB), y más de 550.000 puestos de trabajo, 3,4% del total de puestos de trabajo de jornada completa de la economía española. En 2022 colaboraron con alguna entidad el 39% de la población mayor de 18 años.
Las novedades que introduce la reforma de la ley del mecenazgo de España en la norma 49/2002 son las siguientes:
1. Se estimula el micromecenazgo y se incrementan los porcentajes de deducción: en el caso de personas físicas, se eleva de 150€ a 250€ la base sobre la que se puede deducir el 80% de la donación del IRPF y por el resto habrá un 40% de deducción (en lugar del 35% vigente). En el caso de personas jurídicas, las deducciones en el impuesto sobre sociedades también pasan del 35 al 40%. En ambos casos, para premiar el mecenazgo sostenido, la deducción aumenta al 45% en el caso de personas físicas y al 50% para las personas jurídicas (ambos ahora al 40%) si, en los dos años anteriores, se ha realizado la donación a la misma entidad al menos por el mismo importe.
2. Se incluye en el concepto de donación fiscalmente deducible la cesión de uso de todo tipo de muebles e inmuebles dentro del concepto más genérico de donación de derechos.
3. Se amplía el concepto de convenio de colaboración incluyendo de forma expresa las aportaciones en especie incluida la prestación gratuita de servicios. El colaborador podrá además difundir esta colaboración.
4. Se incluye el denominado mecenazgo de reconocimiento o recompensa que permite que el donante obtenga retornos simbólicos en forma de contraprestación de bienes o servicios, siempre que no representen más del 15% del valor de la donación con un tope máximo de 25.000 €.
5. Se amplían las modalidades de explotaciones económicas exentas, cuando sean desarrolladas por entidades sin ánimo de lucro, en las siguientes actividades: desarrollo e innovación, prestaciones de servicios de inserción sociolaboral de personas en riesgo de exclusión social y de enseñanza y formación profesional vinculadas a estudiantes de altas capacidades.
6.Se refuerza el automatismo por aplicar exenciones de tributos de competencia local a los bienes de entidades sin ánimo de lucro.
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